Competencia Largometrajes Latinoamericana
Los Fantasmas
De Sebastián Lojo
Sinopsis
La película gira alrededor de Koki, un joven guatemalteco que realiza estafas a personas en la ciudad de Guatemala. Estas estafas las lleva a cabo en conjunto con Carlos, luchador y gerente del Hotel Quetzalí. Koki y Carlos funcionan como dos caras de una misma moneda. Son dos fantasmas que tratan de justificar su proceso existencial a partir de estos actos de violencia. Sin darse cuenta, reproducen el mismo sistema que ha construido este contexto urbano que los ha olvidado a ellos y a todos los demás personajes que habitan este mundo. Esta falta de empatía tiene como consecuencia un mundo en el que reina la melancolía, la soledad y un deseo de conexión imposible de satisfacer.
Año de producción
2020
Duración
72'
Origen
Argentina Guatemala
producción
A la deriva, Perro Suelto Cine
Elenco
Marvin Navas, Daniela Castillo, Carlos Morales
bio director/a
Titulado de la London Film School y nominado para el Premio Panalux de la mejor fotografía, Sebastián Lojo ha trabajado como director de fotografía sobre largo y cortometrajes en Malasia, Italia, Turquía, Líbano, Canadá, Reino Unido, Estados Unidos y Guatemala. Los Fantasmas es su primer largometraje como director.
motivación del director/a
Guatemala es un país que, debido a la herencia de su pasado colonial y el reciente conflicto armado interno que duró treinta años, se encuentra profundamente fracturado a nivel racial, económico y sociopolítico. La ciudad de Guatemala es una ciudad que no perdona; que destruye identidad en vez de construirla, que no permite que exista una comunicación honesta, vulnerable y solidaria entre individuos. Es adentro de este mar de fracturas urbanas que nuestros personajes en Los Fantasmas pretenden navegar. Lo que me interesa es retratar las contradicciones que permean a nuestros personajes en este violento contexto urbano y su deseo por encontrar o construir conexiones interpersonales genuinas en una sociedad contemporánea que no permite que estas se existan. Nuestros personajes terminan reproduciendo estas mismas dinámicas violentas y enajenadoras que los han segregado, a nivel sistémico, al abandono y el olvido. Estas son las mismas dinámicas que los han oprimido hasta desaparecer y convertirse en fantasmas con vida condenados a deambular una ciudad y un mundo que no reconoce su dignidad como seres humanos.