Competencia largometrajes Argentina
Zombies en el cañaveral. El documental
De Pablo Schembri
Sinopsis
Documental sobre la “película maldita del cine argentino”. En 1965, tres años antes del estreno de La noche de los muertos vivos” de George A. Romero, y en Tucumán, el director Ofelio Linares Montt filmó Zombies en el cañaveral, un largometraje de terror con fuertes alegorías políticas. Tras un exitoso estreno en Estados Unidos, intentaron exhibirla en la Argentina del gobierno de facto del gral. Onganía, pero la realidad de esos oscuros días no jugó a favor de la película, de la cual se perdió todo rastro. Siguiendo al escritor Luciano Saracino, el documental recorre los pasos de este clásico maldito, con las pocas imágenes que han sobrevivido y los testimonios de críticos y realizadores. Por allí se aventura una idea: ¿acaso no hay muchas “similitudes” entre la película de Linares Montt y George A. Romero?.
Año de producción
2019
Duración
88'
Origen
Argentina
producción
Películas Zapruder
Elenco
Isabel Sarli, Cesar Legname, Luciano Saracino, Mónica Audi Falú, Carlos Lizarraga, Diego Trerotola, Roger Koza, Ramiro San Honorio
bio director/a
Pablo Schembri es responsable de la productora audiovisual Películas Zapruder. Guionista, director y productor del proyecto de largometraje Zombis en el Cañaveral. El Documental (2019). Director y guionista de la serie documental de TV Norte Secreto. Historias y leyendas del Norte Argentino (2015 - 2018). Guionista de la serie de TV Kuska Kay (2015). Guionista y director del proyecto de serie web Juego de sombras y El gato en la caja. Director de arte de la serie web Animales heridos (2019).
motivación del director/a
De las muchas formas de contar la historia de una ciudad elegí hacerlo a través de Zombies en el Cañaveral tomando estas entidades como elementos metafóricos situados en el agitado contexto socio político del Tucumán de mediados de la década del 60. Es la historia de un país y su forma de restringir la libertad y el pensamiento. La censura durante la dictadura del General Onganía justificó la creación del infame Ente de calificación cinematográfica, organismo encargado de velar por los “valores morales, católicos y de familia”. La falta de políticas públicas orientadas al rescate y la preservación de nuestro cine. Por último es, también, un llamado de atención sobre aquello que creemos y damos por cierto. Asumir como real lo que a primera vista parece verosímil anulando toda instancia de pensamiento crítico es peligroso.